Una inquisición en esferas blancas y verdes lo rodeó, de las bermudas al buzo canguro y se quedó del cuello para arriba, inquietándolo.
-Querés saber.- no tenía que preguntar, sólo suspirar. -Te muestro.
Abrió su morral y sacó una caja de madera barnizada, con un pequeño candado al frente, abierto. Ella lo tomó y miró adentro: azules, verdes, grises, muchos blancos; gruesos doblados en siete partes, finitos enrollados, grandes gastados y chicos algo quemados. La caja estaba repleta de papeles.
sábado, 14 de julio de 2007
Pedacitos III
Enunciado por Faco a las 1:40
Etiquetas: Pedacitos C
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